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Los sadhakas que todavía no tienen la capacidad de formar una imagen mental limpia y bien definida de su Ishtadevata, y de mantenerla firme en su mente y en su corazón durante todo el tiempo que dura el Sadhana, debe recurrir al Upasana externo.

Como indicamos en el artículo dedicado a los juguetes eróticos para la práctica del bondage, al efectuar cualquier género de práctica de atadura erótica hay que tener a mano dos tijeras para bondage que, en un caso de urgencia, sirvan para cortar una cuerda de una forma veloz y segura.

Empecemos por cautivar a un hombre. Muchas mujeres pierden la ocasión de seducir a su pareja. Es un enorme error, en tanto que podrías disfrutar de una gran vida sexual si sabes qué hacer para seducir a tu hombre.

Yo pensé que el inconveniente era el trabajo, de forma que tomé unas vacaciones con mi señora, mas las relaciones sexuales proseguían mal. Luego lo intenté con varias amigas y tampoco funcioné. Tras múltiples intentos decidí acudir a un profesional….

Es un regalo con mucho trabajo pues tendrás que preparar las escenas y el guion, incluso deberás reiterar múltiples veces las escenas hasta el momento en que te salga bien del todo o bien estés contento con los resultados, mas lo bueno es que es un regalo asequible y que le va a hacer mucha…

Acá para realizar esta típica y casi tópica, mas siempre y en todo momento efectiva, atadura, utilizaremos cuatro cuerdas de unos 8 a 11 metros de largo cada una (utilizaremos una para cada extremidad) y de un grosor de entre 6 y 18 mm.

Recuerda que una vez junto a ella debes aplicar aros, jiu jitsu, postura corporal, hazla reír, preséntate formalmente y consigue su contacto. Más adelante te voy a enseñar a lograr besos y otras cosas, por el momento concéntrate en la práctica y produce entradas.

¿Has visto esas personas que se la pasan presentando parejas diferentes todo el tiempo y aseguran que esta sí es la persona correcta? Es porque no se han tomado muy en serio esto de reconocerse uno al otro.

Seguir los principios precedentes, pero continuar escudando nuestra falta de confianza en tics, muecas, posturas defensivas o bien cualquier tipo de aspaviento, sería como sepultar todo el trabajo que hemos llevado a cabo.

Ese día fue el primero de la historia de mi conversión a la cerda salida que soy ahora. Mi novio resultó ser un genuino pervertido que fue inculcándome poco a poco las obligaciones de mi nueva condición de puta.